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Conoce los secretos de las abuelas para conservar alimentos

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Antes de la llegada de los refrigeradores, existieron formas con las que tus abuelas alargaban la vida de sus alimentos. Te invitamos a conocerlas.

Almíbar

Es una forma fácil de poder disfrutar de las frutas durante todo el año, incluso fuera de temporada. En esta técnica se emplea una base de jarabe de azúcar, el cual se obtiene a partir de la mezcla de azúcar en agua hirviendo.  Una vez hecho el jarabe, debes esperar a que enfrié y sumergir los trozos de fruta (que en general van sin cáscara). 

 

Encurtidos

En este método se emplea vinagre para conservar los alimentos. A partir de este se pueden disfrutar verduras como pepinillos, ajos, cebollas y hortalizas, así como en algunos casos, diversas frutas (dependerá si te agrada el sabor agrio).

Para realizarlo es necesario un litro de agua, una taza de vinagre blanco, media cucharada de sal y tres cucharadas de azúcar, al igual del alimento (hervido) que vas a guardar. Esta mezcla se lleva a ebullición y posteriormente vaciada en un recipiente limpio y con tapa. Para que después de enfriarse, sea conservada en el refrigerador.

 

Escabeche

Tal vez una ser las técnicas más conocidas por los mexicanos, por aquello de que no podemos vivir sin chiles. Esta consta en cocer los alimentos (vegetales, pescados y carnes) en una sartén con aceite y un chorrito de vinagre; se le añaden verduras como cebolla, ajo y zanahorias, que posteriormente se sazonan con sal, pimienta y varias ramitas de tomillo y laurel.

La cocción dura aproximadamente una hora a fuego bajo, lo cual permite se concentren los líquidos. Se almacena en una recipiente esterilizado y con tapa.

 

Salmuera

Es frecuente confundir a este tipo de conserva con el encurtido, sin embargo, su proceso no incluye vinagre, sino que implica un tiempo considerable de fermentación y una gran proporción de sal. Asimismo, se pueden emplear diferentes hierbas de olor para sazonar los alimentos (en su mayoría hortalizas) como anchoas y alcaparras.

Para realizarlo debes cocer primero los brotes o verduras, y eliminar las partes que no son comestibles. Prepáralo con una mezcla de 150 gramos de sal por cada litro de agua que necesites y rellena el bote con esta mezcla. Tapa y deja fermentar en un lugar oscuro y fresco alrededor de una semana.

 

Mermeladas

Aquí el punto clave del proceso es cocer trozos de fruta en azúcar, pero no te cinfundar, que no es lo mismo que el almíbar, ya que en esta técnica la fruta es machacada y ésta debe estar muy madura. Cuando la mezcla alcanza los 104 °C aproximadamente, el ácido y la pectina de la fruta reaccionan con el azúcar haciendo que al enfriarse quede sólida la mezcla.

Para que se forme la mermelada se debe considerar que la fruta contenga pectina. Las frutas  que la contienen son: las manzanas, cítricos, frutas del bosque, a excepción de las fresas y las zarzamoras.

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