¡Las donas light existen!
Es posible comer donas sin remordimiento y aunque estés cuidando tu alimentación. Las rosquillas horneadas contienen mucho menos grasa que las fritas, prepáralas en casa y acompáñalas con un té o infusión sin azúcar, simplemente deli. ¡Se vale pecar!
Preparación
1. Coloca en un tazón la leche tibia con levadura y déjala reposar por 5 minutos.
2. Agrega la mantequilla, azúcar, huevo, sal, nuez moscada y harina. Mezcla bien hasta que forme una masa uniforme que se despegue de los lados del tazón (no debe quedar pegajosa).
3. Enharina una superficie y amasa la mezcla un par de veces antes de hacer bolas. Deja reposar la masa en un tazón engrasado hasta que se levante y se vuelva del doble de tamaño.
4. Extiende la masa con un rodillo hasta que tenga cerca de un centímetro de grosor. Con ayuda de un vaso corta círculos para formar las donas.
5. Coloca los círculos en una charola para hornear. Utiliza un cortador de galletas para quitar el centro de las donas.
6. Cubre la charola con una toalla de cocina y deja que la masa repose por 45 minutos.
7. Cocina las donas en el horno a 190° o hasta que se doren de abajo.
8. Saca las donas y déjalas enfriar por un par de minutos.
Montaje
1. Decora las donas con un glaseado de maple que puedes hacer mezclando 2 cucharadas de miel maple con una cucharada de azúcar glass y un poco de canela.
Recomendación
Sírvelas inmediatamente para que estén crujientes y calientitas.
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