Trucos para que la sandía cortada dure más tiempo y no se eche a perder
Aprende cómo conservar la sandía cortada para que dure más tiempo sin que pierda su sabor y jugosidad. Tampoco se echará a perder, especialmente durante los días calurosos y permanezca en su mejor estado.
La sandía es de las frutas que más amamos, ya sea que la comamos en rebanadas solas, la preparamos en agua, en ensaladas o hasta en smoothies.
Eso sí, esta fruta está llena de agua y es normal que después de 3 o 4 días pierda su jugo, ¿pero podemos hacer algo para que esto no suceda? ¡Sí!
Hay algunas formas de conservarla por más tiempo, aunque si no la quieres por más de 3 días, algunos trucos no funcionarán; sin embargo, tenemos buena opciones para solucionar esta situación.
Tips básicos para conservar la sandía:
- Tamaño de la sandía: la fruta, cuando se corta, que sea en rebanadas o trozos de buen tamaño, aunque tú eliges dependiendo de lo que buscas.
- Tipo de sandía: cuando elijas la sandía, escoge una madura para que la frescura dure. Elige una con la base amarilla cremosa, también si la golpeas, el sonido hueco indica que está lista para ser consumida.
- Almacenamiento adecuado: de preferencia, en un recipiente hermético de buen tamaño.
- Temperatura en el refrigerador: según la USDA, la sandía en el refrigerador debe estar bajo una temperatura por debajo de los 4ºC, para evitar el crecimiento de bacterias.
- Recetas con sandía cortada: no solo la comas en trozos, también puedes usarla en ensaladas con queso feta, smoothies o helados caseros.
Foto: iStock
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Trucos para que la sandía cortada no se eche a perder
Congelar
- Corta la sandía por la mitad y después en cubos.
- Coloca los cubos en una bandeja para hornear y métela al congelador (es importante que no estén encimados).
- Déjala congelar por un tiempo (se recomienda checar cada 10 minutos).
- Una vez congelada, saca del congelador, vierte los cubos de sandía en un recipiente hermético, tapa y de vuelta el congelador
- Déjala ahí el tiempo que necesites, puede durar hasta 6 meses en congelación
Menta y limón
- Corta la sandía en rebanadas o trozos, intenta quitarle parte de la humedad,
- Exprime el limón sobre la superficie de la sandía cortada. Ajusta la cantidad según tu preferencia de sabor, pero asegúrate de cubrir todas las porciones de la fruta.
- Pica las hojas de menta fresca lo más finamente posible, espolvorea sobre la sandía con limón. Alternativamente, puedes machacar ligeramente las hojas para liberar aún más el aroma y sabor de la menta. Mezcla suavemente para asegurar una distribución uniforme.
- Coloca la sandía tratada en un recipiente hermético o envuélvela con plástico adherible antes de refrigerarla.
Con plástico adherible
- Después de cortar la sandía en trozos o rodajas, asegúrate de que esté limpia y seca.
- Envuelve cada pedazo de sandía de manera individual, utiliza plástico adherible y tiene que crear un sellado hermético.
- Si prefieres, puedes colocar la sandía en bolsas de plástico, pero que sean herméticas. Asegúrate de expulsar el exceso de aire antes de sellarlas para maximizar la eficacia de la barrera plástica.
- Lleva la sandía al refrigerador a una temperatura menor de -4ºC.
Estos trucos para conservar la sandía cortada harán que dure más tiempo sin ningún problema, son cosas básicos que debemos aprender para que no terminemos gastando de más porque la fruta se echó a perder.
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