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Elimina los hilos de grasa y cochambre de la campana de la cocina: truco infalible

Foto: Elimina los hilos de grasa y cochambre de la campana de la cocina: truco infalible Foto: iStoc
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La estufa es uno de los lugares más vulnerables a la acumulación de grasa y la campana no se salva. Si has notado hilos de grasa colgando, te decimos cómo quitar el cochambre de la campana de la cocina fácilmente.

 

Una de las mayores pesadillas a la hora de limpiar la cocina, es enfrentarnos al cochambre. Este se define como una capa de suciedad, formada principalmente por grasa u otra sustancia pegajosa, aunque también puede contener polvo e incluso óxido.

 

Los lugares más comunes donde lo vemos, es en la estufa y horno, por el uso constante y el contacto con la grasa y jugos de alimentos. Sin embargo, un sitio donde se acumula silenciosamente, es en la campana de la cocina.

 

La campana o extractor de la cocina, sirve para absorber el humo al cocinar, por eso está colocada justo encima de la estufa. Con esto, se busca reducir el riesgo de que tu casa termine llena de humo y olores a comida.

 

¿Cómo quitar el cochambre de la campana de la cocina?

Mantener nuestra cocina limpia, es fundamental para evitar enfermedades como intoxicaciones alimentarias, pero también accidentes. Aunque el cloro o el amoniaco son perfectos para eliminar la suciedad, pueden ser tóxicos. Mejor prueba con esta técnica infalible.

 

Necesitas:

  • 1 ½ litros de agua
  • 2 tazas de vinagre
  • 1 cucharada de jabón líquido para trastes
  • Bicarbonato de sodio
  • 1 limón

 

  1. Retira los filtros de la campana para dejar el interior expuesto.
  2. En una olla, mezcla el agua con el vinagre y el jabón, y hierve. Deja hervir durante al menos 30 minutos, para que actúe el vapor y se ablande el cochambre, así será más fácil desprenderlo.
  3. Pasado el tiempo, con una esponja o fibra, retira la mayor cantidad de cochambre posible.
  4. Para retirar la grasa pegada y dejar la campana impecable, mezcla bicarbonato de sodio con jugo de limón hasta formar una pasta.
  5. Aplica esta pasta en un cepillo o fibra, y talla el interior.
  6. Pasa un trapo húmedo, puedes humedecerlo en agua y un poco de cloro, para retirar la suciedad.
  7. Finalmente, pasa un trapo limpio y coloca el filtro limpio.

 

Para limpiar los filtros, sumérgelos en una tina con agua tibia, jabón líquido y vinagre. Deja reposar 40 minutos y talla con una fibra, enjuaga y seca.

 

¿Crees que tu campana no tiene cochambre? Échale un ojo. La realidad es que, al cocinar, se expulsan humos impregnados con grasa que se va adhiriendo a los filtros e interior de la campana. Si no tienes el hábito de limpiarla regularmente, terminará en una capa gruesa y pegajosa.

 

El problema con el cochambre, más allá de que se vea mal y sea difícil de quitar, es que eleva el riesgo de incendios, pues la grasa es altamente inflamable.

 

De hecho, como explica la Comisión Nacional de Protección Civil, el cochambre y otro tipo de grasas, pueden provocar un incendio clase “K”, algo común en cocinas domésticas o comerciales, que requiere extinguirse con extintor de acetato de potasio.

 

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Sin duda, eliminar el cochambre y la grasa pegada de la cocina, puede ser muy laborioso, pero antes de hacer alguna mezcla extraña, digna del laboratorio de química, toma en cuenta que, en general, la recomendación es no mezclar productos de limpieza.

 

En especial hablamos del cloro, que siempre debe usarse diluido (20 mililitros de cloro por 1 litro de agua) y únicamente debe mezclarse con agua, además de que el área debe estar ventilada, de lo contrario podrías aspirar gases tóxicos.

 

Algo especialmente peligroso, subraya la Universidad Nacional Autónoma de México, es mezclar cloro con amoniaco, pues generan cloramidas, sustancias muy tóxicas, capaces de producir problemas pulmonares y daño al hígado a largo plazo.

 

Para prevenir riesgos y acabar con el cochambre y los hilos de grasa de la campana de la cocina, prueba esta técnica natural. Y si prefieres algo más rápido, siempre lee las instrucciones de los limpiadores y nunca los mezcles.

 

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