4 consejos para almacenar las zanahorias y evitar que se marchiten

Las zanahorias son un tubérculo que se caracteriza por su textura crujiente cuando se comen crudas; sin embargo, estos vegetales tienden a ponerse “aguadas” si no se almacenan de la manera adecuada.

Para que no tengas que saborearlas marchitas, te mostramos cómo conservar las zanahorias frescas por más tiempo:

1. Evita lavarlas antes de guardarlas, solo elimina el tallo, ya que si lo conservas es probable que este vegetal se torne flácido prematuramente.

2. No las peles, colócalas en un recipiente con agua (cubierto) dentro del refrigerador.

3. También puedes introducirlas en una bolsa de plástico (abierta) y aléjalas de las frutas y verduras que liberan etileno.

4. Otra forma es almacenarlas en un lugar fresco de tu casa con un poco e aserrín o arena húmeda.

Con estos tips podrás disfrutar de zanahorias frescas y crujientes por meses.

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