Los tamales de chocolate más esponjosos y fáciles, ¡llevan leche condensada!
El tamal es un platillo que todo México conoce, hecho a base de maíz, salsa y relleno; envuelto en diferentes hojas y cada receta con su propia versión, según el lugar del país donde se prepare. ¡Es una tradición culinaria que no pasa de moda!
En la dieta de todos los mexicanos, hay tamales de por medio. De varios colores, texturas y sabores, es un clásico que consumimos como desayuno, comida o cena. El tamal se adapta a cualquier paladar y hasta al bolsillo.
De acuerdo con el Diccionario Gastronómico de Larousse, el tamal es una preparación de origen prehispánica producida con masa de maíz molido, salsa y al que se le agregan diferentes rellenos, como frijoles, verduras y hasta carne.
Esta vez revolucionamos los tradicionales tamales de chocolate y les añadimos más sabor al rellenarlos con leche condensada, se trata de una receta fácil que queda súper esponjosa y podrás disfrutarlos el Día de la Candelaria.
Receta de chocolate caliente con vino tinto
Preparación
- Mezcla los ingredientes secos: la harina, el polvo para hornear, el bicarbonato, la sal y la maicena; reserva.
- Bate la mantequilla durante 5 minutos o hasta que esponje.
- Agrega la leche condensada, la vainilla y mezcla hasta incorporar por completo.
- Añade la cocoa en polvo, previamente cernida.
- Agrega la harina preparada y la leche condensada
- Mezcla perfectamente hasta deshacer los grumos.
- Rellena las hojas de tamales y acomoda en una vaporera.
- Cuece los tamales de chocolate y leche condensada durante 40 minutos o hasta que se despeguen de las hojas fácilmente.
- Disfruta de los tamales de chocolate acompañados de una bebida caliente.
Tips extra:
- Agrega a la masa unos trocitos de chocolate picado o bien rellena con ellos.
- En el norte del país, también se rellenan con cajeta, así que puedes seguir el mismo consejo.
- No olvides cubrir los tamales con un paño húmedo cuando se están cocinando en la vaporera.
Foto: iStock
¿Cómo hacer los tamales más esponjosos?
- Utiliza masa de buena calidad.
- Añade grasa adecuada a la masa.
- Bate la masa correctamente, así les estarás añadiendo aire y lograrás una mejor consistencia.
- Añade líquido gradualmente para evitar que la masa quede demasiado aguada.
- Asegúrate de que la masa esté bien hidratada.
- Prueba la consistencia de la masa para asegurarte de que esté lo suficientemente suave y esponjosa.
- Envuelve los tamales adecuadamente, de forma apretada para retener la humedad.
Los tamales dulces siempre serán de nuestros favoritos, por eso es que esta receta de chocolate y leche condensada, no puede faltar en tu repertorio. ¡Consiente a tu familia con los mejores tamales del mundo!
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