Enchiladas de mole: llenadoras y listas en 4 pasos

Las enchiladas de mole son una de las formas más fáciles y deliciosas de aprovechar esta sabrosa salsa. La combinación de mole, tortillas y pollo las convierte en un plato ganador. Te compartimos nuestra receta sencilla para que las prepares en casa y sorprendas a tu familia.

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ENMOLADAS

Procedimiento:

• Cocina las pechugas en 2 litros de agua con la cebolla, el ajo y la sal. Una vez cocidas, sácalas del caldo, deja que se enfríen y deshebra; guarda el caldo.
• Hidrata el mole con un poco de caldo de pollo y revuelve hasta que no queden grumos. Cocina durante unos minutos y ajusta el sabor, añadiendo sal si es necesario.
• Fríe las tortillas en una sartén con un poco de aceite caliente, escúrrelas y sumérgelas en el mole. Rellénalas con el pollo desmenuzado y ciérralas.
• Decora las enmoladas con crema, queso, cebolla y ajonjolí tostado. Acompáñalas con un poco de lechuga y rábanos.

Prepara estas deliciosas enchiladas de mole y verás cómo tu familia quedará encantada, ¡y tú más con lo fácil que son de hacer!

¿Qué tipo de mole se usa para las enchiladas?

El tipo de mole que elijas para tus enmoladas depende de tus preferencias personales. Sin embargo, los dos tipos más comunes son el mole almendrado del estado de Puebla y el mole negro de Oaxaca.

También puedes usar otros moles como el encacahuatado y el pipián, siempre y cuando sean lo suficientemente líquidos para cubrir las tortillas sin que resulten demasiado pesadas.

Origen del mole

Seguramente has disfrutado del mole en más de una ocasión, pero ¿sabes de dónde proviene? Aunque existen diversas versiones, se cree que el mole tiene sus raíces en Puebla de los Ángeles en el siglo XII, aunque su creador sigue siendo un misterio.

La historia del mole se remonta a la época prehispánica, donde se preparaban diversos alimentos con diferentes tipos de salsas. Este arte culinario se perfeccionó durante la época colonial, como señala el Gobierno de México.

Con el paso de los años, el mole se ha convertido en uno de los platos más icónicos de México, conquistando tanto a locales como a visitantes extranjeros. Aunque existen muchas formas de disfrutar el mole, las enchiladas de mole sin duda están entre nuestras favoritas.

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