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Por esta razón vas a querer comer QUELITES a diario

Foto: SAVOIR FAIRE
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El término quelite proviene del náhuatl, quilitl, que significa hierba comestible, lo cual es un genérico para denominar a varias hojas, tallos comestibles, brotes y a algunas flores.

De las 25 mil especies de plantas que existen en México, se estima que 500 son consideradas quelites. Estos eran muy valorados por los aztecas y de acuerdo con documentos escritos durante los años posteriores a la conquista, se tienen catalogadas 150 especies, de las cuales actualmente, se consumen 15.

Los quelites se pueden preparar de muchas formas, aunque también se comen crudos; otros se cuecen o fríen ligeramente y se combinan con sopas, tacos, quesadillas, pinole o esquites.

En algunos platillos constituyen el componente principal, asimismo pueden ser el condimento que proporciona diferentes sabores y aromas. En la antigüedad, se les añadía un poco de tequesquite, una sal mineral utilizada desde tiempos prehispánicos y que resalta su color verde.

 

Estas plantas se adaptan a cualquier tipo de suelo, ya que presentan una alta resistencia a climas drásticos; sin embargo, la mejor temporada para consumirlos es la de lluvias.

El consumo de quelites en México ha decaído en los últimos años; sin embargo, a pesar de que su popularidad ha variado a lo largo de la historia, las nuevas formas de alimentación no han logrado reemplazarlos.

 

¿QUÉ BENEFICIOS TIENEN?

1. Los quelites presentan grandes cantidades de fibra, potasio y hierro, nutrientes que superan incluso a las verduras de hoja verde como las espinacas.

2. Están compuestos en un 75% de agua y un 25 % de hidratos de carbono, fibras y en cantidades pequeñas, de lípidos.

3. Al presentar polifenoles (que actúan como antioxidantes), previenen enfermedades cardiovasculares.

4. Son ricos en ácidos grasos Omega 3 y 6, los cuales disminuyen el riesgo de enfermedades cardiovasculares y accidentes cerebrovasculares.

5. Contienen varios carotenoides, compuestos vitales para la dieta humana; funcionan como antioxidantes, reducen las probabilidad de ataques cardiacos y aumenta la eficiencia del sistema inmunológico. 

 

RECOMENDACiÓN

No creerás toda la comida prehispánica que seguimos consumiendo

 

 

 

 

 

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