La razón por la que los supermercados cambian de lugar los productos
Llegas como cada semana a comprar lo que necesitas del supermercado y te encuentras con la terrible noticia de que han cambiado y movido TODO de su lugar.
Entras en crisis y lo único que resta por hacer es recorrer todo el lugar y tratar de no perder el tiempo sin caer en desesperación. ¿Te ha pasado?
En lo personal, cada periodo que hacen esta clase de cambios termina siendo frustrante y tedioso, debido a que recorro cada uno de los pasillos y trato de aprenderme de nuevo en dónde quedan las secciones y productos.
Seguramente ya has pasado por esto sin entender la razón, pero la realidad es que forma parte de un juego psicológico que los supermercados tienden a realizar con el fin de que compres más.
Existen varios secretos que deberás conocer para salir victoriosa, ¿Estás lista?
- Cambio de ubicación de los productos. Como ya lo mencionamos, periódicamente se hacen esta clase de cambios con el fin de que las personas recorran los pasillos, pasando más tiempo en el super comprando cosas innecesarias que se antojan en el recorrido.
- Los carritos cada vez son más grandes. La psicología ha demostrado que los consumidores al ver un carrito tan vació no se sienten satisfechos, por lo que necesitan verlo lleno para sentirse cómodos y esto, obviamente aumenta el precio.
- No nos fijamos en los centavos. Seguramente te has encontrado que la lata de atún o frijoles cuesta $ 9.99 y decides comprarla, sobre aquella que cuesta $10.00, creyendo que es más cara; por lo que vas llenando el carrito del producto y esto incrementa el total de la cuenta. La realidad es que mientras creemos que es más barato, compramos de más.
- Los artículos imprescindibles siempre se encuentran al fondo de la tienda. Esto sucede debido a que esto obligará al consumidor a recorrer todo el lugar y encontrase con distintas ofertas y productos que no pensaba comprar.
- La zona de productos rebajados es un caos. Si de por si es terrible sobrellevar el cambio de todas las secciones, visitar el pasillo de rebajas es una pesadilla. Esto orilla a que la gente se aleje de las ofertas y consuma los productos más caros, por el simple hecho de no visitar esos pasillos desastrosos y llenos de mucha gente.
- La tentación de los productos que se encuentran a lado de cada caja. Admitámoslo, más de una vez hemos caído en la tentación de comprar dulces, chicles o artículos que no sabemos para qué sirven pero se ven coloridos y atractivos y no podemos perder la oportunidad de llevarlo porque estamos en la caja a unos cuentos metros de pagar la cuenta.
- Los productos se encuentran al alcance de nuestros ojos. Seguramente pensarás que esto no es tan malo, pero la realidad es que nuestra mirada se enfoca en un solo producto y esto no permite buscar más ofertas o artículos baratos, por lo que muchas veces podemos comprar lo que cuesta más caro.
Es inevitable y hemos caído en muchas ocasiones, o por lo menos yo me declaro culpable de hacerlo cada que voy al super.
Los supermercados han jugado con nuestra mente durante toda nuestra vida, es momento de preparar la lista de todo lo que necesitamos y no caer en el juego y comprar lo innecesario.
Estamos seguras que con estos consejos la victoria estará ganada.
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