Dejó de tomar alcohol por 3 meses y los resultados fueron asombroso

Sabemos que beber en exceso tiene consecuencias muy negativas en nuestro organismo, existen cambios físicos, mentales y emocionales; por lo que es recomendable evitar consumir esta clase de bebidas de forma continua.

Robert Cocuzzo, corresponsal de la revista Vanity Fair y autor de “Tracking the Wild Coomba”, se encontraba con los efectos de una dura resaca y al darse cuenta que desde la universidad no había dejado de tomar, tomó la decisión de experimentar y ver los efectos que se tienen al vivir sobrio durante tres meses seguidos.

Las primeras semanas puede ser muy difícil dejar el hábito, pero Cocuzzo recomienda tener siempre un motivo u objetivo para hacerlo. También sirve mucho compartir la noticia con nuestros amigos y familia cercana para que funcionen como apoyo.

Primera semana

En esta primera semana Rober se dio cuenta que dormía mucho mejor, incluso, se lograba despertar a las cinco de la mañana para escribir el libro que en ese momento estaba realizando, además de que noto mayor hidratación en su organismo.

Segunda semana

Algunos cambios fueron: su estado de ánimo, ya que se mantenía mucho más activo y animado, también dejo de presentar irritación y reflujo estomacal.

Aunque apenas llevaba dos semanas sin una gota de alcohol, notó una ligera pérdida de peso y la hinchazón había bajado notoriamente.

Primer mes

Su presión sanguínea disminuyó y su apariencia física mejoró. Noto que su piel tenía más elasticidad y un brillo natural, incluso, ya no presentaba manchas y pequeñas arrugas en su rostro.

Segundo mes

Su alimentación se mantuvo, con la única diferencia de que había dejado de beber, por lo que su hígado mejoró su funcionamiento, ayudando tolerar de mejor manera las comidas grasas que consumía.

Tercer mes

La memoria de Robert mejoró gracias a que los glóbulos rojos se renovaron, además de tener mayor energía y mejor salud, otro punto positivo fue que sus sentidos se agudizaron y estaba mucho más consciente de sus actos.

Los problemas económicos se redujeron gracias  a que dejó de gastar en cócteles y bebidas innecesarias, esto le permitió ahorrar de forma más rápida y adquirir un nuevo coche y casa.

Se encontraba más alegre y relajado, de hecho declara que después de tomar la decisión de no tomar alcohol, su estado emocional mejoró y se siente más feliz que antes.

Su olor corporal cambió y sus prendas dejaron de apestar a alcohol.

Este experimento llegó a su fin seis meses después y las conclusiones fueron que deseaba seguir con la misma rutina, añadiendo de vez en cuando una copa de vino al cocinar, más no desperdiciar los fines de semana con resacas mortales.

Definitivamente dejar de tomar te trae mayores beneficios que tu cuerpo te agradecerá.

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