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Cómo curar y limpiar las ollas de cobre

Foto: iStock
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Este tipo de utensilio es uno de los más bonitos en la cocina. Por su brillo, su resistencia y su distribución del calor, son perfectas compañeras para los que nos encanta cocinar. 

Son súper útiles para preparar verduras, pues al cocinarlas en este tipo de material no se oscurecen y mantienen un color intenso. Por eso muchas abuelitas prepraraban los nopales en este tipo de ollas. 

También sirven para preparar caramelos, dulces típicos y mermeladas. 

 

Emoción es lo que sentirás al comprar una olla de este material, pero antes de que te gane la locura y comiences a usarla "como viene", debes de curarla para evitar cualquier sustancia que pueda resultar nociva a tu salud. 

Para esto necesitas unos limones partidos a la mitad y un poco de bicarbonato de sodio.

  1. Protege tus manos antes de empezar y usa guantes durante todo el proceso de limpieza. 
  2. Cubre los limones con un poco de este polvo; frota por dentro y por fuera, tanto paredes como el fondo de la cacerola. 
  3. Deja reposar por unos minutos, retira el jugo y los gránulos de bicarbonato con abundante agua. 
  4. Finalmente lava la olla esponja y detergente, ninguno de los dos debe ser abrasivos, de lo contrario puedes dañar el material.  

 

 

Después de cocer algunos alimentos, puede tornarse oscura. Para regresarlas a su normalidad puedes usar el método anterior, intercambiar el limón por un poco de vinagre blanco o agregar un poco de sal a la mezcla básica de limón y bicarbonato. 

Es importante que no las utilices cuando éstas se encuentren opacas, pues esta capa verdosa llamada cardenillo, es una clara advertencia de que pueden liberar sustancias que no deseas en tus alimentos y provocar intoxicaciones. 

Además, de que el sabor de tu comida se alterará y, se impreganará de un horrible sabor metálico. 

Después de lavarlas puedes secarlas inmediatamente con un trapo de algodón, que no suelte pelusa, para evitar que se manche la olla con las gotas de agua y puedes guardarla, completamente lista para su próximo uso. 

 

Con estos cuidados tu olla durará años y años a tu lado. 

 

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