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Aprende a preparar tu propio queso mozzarella casero (incluye receta)

Foto: istock
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Si te consideras un amante del queso, seguramente eres fan del icónico queso italiano, mozzarella. Este delicioso queso, con poca cantidad de grasa, es ideal para preparar pizza, ensaladas, gratinados y salsas cremosas.

El queso mozzarella con denominación de origen, se elabora en la región de la Campana al sur de Italia en las provincias de Nápoles, donde, se hacer a partir de la leche de búfala.

Pero, éste también se puede elaborar con leche de vaca y lo mejor, es que lo puedes hacer en la comodidad de tu hogar.

Si te gustaría aprender a prepararlo, te compartimos la siguiente receta.

Ingredientes

  • 1 galón de leche pasteurizada, esta leche se encuentra refrigerada en los supermercados (no compres ultra pasteurizada, de lo contrario no te quedará)
  • 1 cucharadita de cuajo, la puedes conseguir en algunas veterinarias o farmacias especializadas en químicos.
  • 1 ½ cucharadita de ácido cítrico, la consigues en la misma farmacia donde compras el cuajo o en tiendas especializadas de repostería.
  • 6 cucharadas de sal de mar que no tenga yodo
  • ½ taza de agua

Procedimiento

  1. DIVIDE el agua en dos partes iguales y a una mitad añádele el ácido cítrico y a la otra el cuajo.
  2. CALIENTA la leche a fuego medio y adiciona con cuidado el ácido cítrico, mezcla por un minuto y verifica la temperatura que debe de estar a 32°C.
  3. AGREGA el cuajo, mezcla suavemente por 30 segundos; tapa y deja reposar por 10 minutos.
  4. DESTAPA y corta la cuajada con una espátula de metal para formar una cuadrícula; vuelve a calentar hasta llegar a 40.5°C. Mueve suavemente para evitar romper la cuajada.
  5. RETIRA los trozos de la cuajada con una espátula de metal o una espumadera y colócalos cobre una coladera de metal.
  6. CALIENTA el suero a 80°C, añade la sal, mezcla por un minuto y coloca la coladera adentro del suero; la cuajada debe quedar sumergida en el suero y calienta hasta que la temperatura interna de la cuajada llegue a 54°C.
  7. RETIRA la cuajada del líquido cuando llegue a la temperatura mencionada y utilizando guantes, idealmente de silicón, trabaja la cuajada “amasándola” hasta que se endurezca y puedas formar una bola.
  8. SUMERGE la bola adentro de un baño de agua fría con hielo por 30 minutos.
  9. SIRVE el queso o utilízalo para preparar tus recetas favoritas.

Guarda el queso en un recipiente hermético con tapa en el refrigerador.

 

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